Noticias desde la zona centro de la ciudad... Entérese!!
Normalmente los días 6 de enero me parecen un tanto tediosos. Son como esos momentos que te sientes sitiado y no sabes como comportarte, cualquier movimiento en falso puede costarte, desde llantos infantiles, hasta las críticas de que eres un témpano, para finalmente llegar al consabido adjetivo de amargada...
Vivir en el corazón del d.fectuoso tiene la particularidad de exorcizar los miedos. Desde los más ocultos, como caminar entre indigentes a las 2 de la mañana, pasando por el miedo a los temblores, la agorafobia o los ruidos extraños de la noche, los cuales se traducen en mentadas de madre, gritos de trasvestís; borrachos reclamando el ser sacados de los tugurios, entre otros que después se convierten en el canto de ballenas para dormir, es decir, sin ellos no puedes pegar los ojos.
Sin embargo, dado el contacto cuasi obligatorio que tienes con la gente, nadie se salva de rozones con extraños en las calles, cruces, metros y plazas, me he dado cuenta que el secreto es que al final todo se integra a tu cotidiano. Eso me pasó con la fiesta de los Reyes Magos.
Desde hace más de una semana, miles de duendes con coronitas de papel dorado, hadas con brillantes tiaras llevando en sus pequeñas manos globos y grandes algodones de azúcar habían estado pasando por mi acera. Incluso más de una vez, un duende o hada me embarró de azul azúcar mi chamarra o brazo; son muy raras las substancias que las hadas y elfos segregan en estado de felicidad.
En fin, las dos primeras noches estaba tan asustada que no deseaba salir de mi departamento; eran rios de ellos los que corrían a lo largo de la calle. Sin embargo al cabo de tres días, me daba curiosidad ver lo que hacían, en que idioma se comunicaban y sobre todo el lugar al que se dirigían. Dicen que eran miles, otros centenas, no sé, sólo me percate que iban y venían a una especie de santuario expuesto y dispuesto sobre Eje Central, motivo por el cual, también en mi calle alaridos de claxóns se escuchaban desde las 6 hasta las 11 de la noche.
Ayer finalmente pasamos por el santuario, por miedo a convertirnos, -no creemos en los conversos- exclamábamos a coro Caguamita, Cubaraimo y yo, husmeamos sólo un poco. Luces de colores, olores dulces, dicen que a los duendes y hadas les fascinan, globos, coronas, juegos de diversas formas y mares de reyes, reinas, hasdas y duendes, aquello era inverosímil, dado que vivo en un lugar en donde cuenta la leyenda patria, que la realeza nunca existió...
Lo más emocionante de todo, fue un juego en donde los pequeños seres se introducían en unas grandes pelotas, éstas eran infladas para luego ponerse a rodar en una albercucha de agua, sucia. Era fascinante verlos desplazarse a través de esos planetas transparentes que iban sobre el miasma, pero los de adentro quedaban intactos. Me dije sin pensarlo, deseo estar ahí, el problema es que dadas mis dimeNsiones no fue posible. Una pena, en verdad me parecía lo suficientemente etéreo para experimentarlo.
Creo que al final, mi miedo a esos Reyes Magos fue desapareciendo en la comisura de mi boca, que según Cubaraimo, levemente dibujaba una sonrisa.
Es con el mayor de los respetos pero parece que te has convertido en una Seudointelectual Pretenciosa, que escribe como si hubiera salido de la Iberoamericana, y no de la grandiosa UNAM; si yo conocia alguien muy autentica eras tú pero ahora parece que estar cursando un grado de Maestria dibuja (en mi muy limitada vision)que has perdido el suelo y ahora no eres nada de lo que recuerdo; la pregunta a analizar es si es parte de una evolucion personal o una involucion disfrazada de un triste desprecio por la gente que somos ignorantes o formamos parte del grueso de la poblacion. Lo mas raro es que se supone que eres sociologa y parece que estudiaste derecho. Pero bueno quien soy yo, nadie; como todos los demas que esperamos ser algun dia un poco como tú.
ResponderEliminarEstimado compañero, de verdad que no tengo la menor idea de que hablas... creo que deberías saber que este tipo de plataformas electrónicas posibilitan desdoblarte un poco de la realidad, es un gusto haberte creado una confusión. Sin embargo, creo cualquiera sabe que un sociólogo se preocupa por su entorno, por las manifestaciones culturales, estéticas y políticas de su cotidiano, te recomiendo que releas incluso a Marx, a Lukács, y muchos más marxistas además de Benjamin que además de teoría coqueataron con otras manifestaciones para desarrollar contrapropuestas político-estéticas.
ResponderEliminarGracias por tantas lineas.